La tirzepatida es un nuevo fármaco que se está investigando para el tratamiento de la diabetes tipo 2 y la obesidad. Se trata de un polipéptido sintético que combina las acciones de dos hormonas naturales que regulan el metabolismo de la glucosa y el apetito: el péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1) y el péptido similar al glucagón tipo 2 (GIP). Estas hormonas se liberan en el intestino después de comer y tienen efectos beneficiosos sobre el páncreas, el hígado, el cerebro y el tejido adiposo.
El mecanismo de acción de la tirzepatida incluye los siguientes efectos:
- Estimula la liberación de insulina en el páncreas cuando los niveles de azúcar en sangre son altos.
- Disminuye la producción de glucosa en el hígado.
- Reduce el apetito y aumenta la sensación de saciedad en el cerebro.
- Favorece la quema de grasa y la reducción del tejido adiposo.
La tirzepatida se administra mediante una inyección subcutánea una vez por semana. La dosis inicial es de 2,5 mg y se puede aumentar progresivamente hasta un máximo de 15 mg, según la respuesta individual de cada paciente.
El ensayo clínico SURMOUNT-2 es uno de los estudios que forman parte del programa global de investigación con tirzepatida en diferentes poblaciones y condiciones. Este ensayo tiene como objetivo evaluar la eficacia y la seguridad de la tirzepatida en comparación con placebo para el tratamiento de adultos con diabetes tipo 2 y obesidad o sobrepeso.
El ensayo reclutó a 1.879 participantes con un índice de masa corporal (IMC) entre 27 y 45 kg/m² y una hemoglobina glicosilada (HbA1c) entre 7% y 10,5%. Los participantes fueron asignados al azar a recibir una inyección semanal de tirzepatida (10 mg o 15 mg) o placebo, además de seguir una dieta baja en calorías y aumentar la actividad física. El seguimiento duró 72 semanas.
Los resultados del ensayo se presentaron en junio de 2023 en la 83ª Sesión Científica de la Asociación Americana de Diabetes (ADA) y se publicaron en la revista The Lancet (SURMOUNT-2: new advances for treating obese type 2 diabetes with tirzepatide – The Lancet). Los datos mostraron que la tirzepatida logró una reducción media del peso corporal de hasta el 15,7% con la dosis más alta (15 mg), frente al 3,3% con placebo. Además, la tirzepatida mejoró significativamente los niveles de HbA1c, la presión arterial, los lípidos y otros marcadores metabólicos (péptido C, HOMA-IR, HOMA-B, adiponectina, leptina) en comparación con placebo.
Los efectos adversos más frecuentes asociados a la tirzepatida fueron náuseas, vómitos, diarrea y dolor abdominal, que fueron generalmente leves o moderados y disminuyeron con el tiempo. No se observaron casos graves de hipoglucemia ni eventos cardiovasculares mayores.
El ensayo clínico SURMOUNT-2 demuestra que la tirzepatida es un fármaco prometedor para el tratamiento integral de la diabetes tipo 2 y la obesidad, ya que mejora el control glucémico y favorece la pérdida de peso. Sin embargo, se necesitan más estudios para confirmar su eficacia a largo plazo y su perfil de seguridad.
Para comparar la tirzepatida con otro fármaco para la diabetes y la obesidad, podemos tomar como referencia la semaglutida, que es un potente agonista del receptor de GLP-1 que se administra también una vez por semana. La semaglutida tiene un efecto similar al de la tirzepatida sobre la secreción de insulina y la producción de glucosa, pero no actúa sobre el receptor de GIP, que está implicado en la regulación del apetito y el metabolismo de las grasas.
En el ensayo SURPASS-2 (Tirzepatide versus Semaglutide Once Weekly in Patients with Type 2 Diabetes | NEJM), se comparó directamente la tirzepatida con la semaglutida en pacientes con diabetes tipo 2 y obesidad o sobrepeso que recibían metformina como tratamiento de base. Los resultados mostraron que la tirzepatida fue superior a la semaglutida en la reducción de la HbA1c y el peso corporal con todas las dosis estudiadas. La diferencia media estimada en la HbA1c para los grupos de 5, 10 y 15 mg de tirzepatida frente a semaglutida fue de –0,15; –0,39 y –0,45 puntos porcentuales, respectivamente. La diferencia media estimada en el peso corporal fue de –1,9; –3,6 y –5,5 kg, respectivamente. Estas diferencias fueron estadísticamente significativas y clínicamente relevantes.
Los efectos adversos más comunes en ambos grupos fueron los gastrointestinales, que fueron en su mayoría leves o moderados. La incidencia de hipoglucemia clínicamente significativa fue baja en ambos grupos. No se reportaron eventos cardiovasculares mayores.
Estos datos sugieren que la tirzepatida tiene un perfil de eficacia superior al de la semaglutida para el tratamiento de la diabetes tipo 2 y la obesidad, al combinar los efectos del GLP-1 y el GIP. No obstante, se requieren más estudios para evaluar el impacto a largo plazo de la tirzepatida sobre las complicaciones microvasculares y macrovasculares de la diabetes.
La investigación de hoy es la terapia del futuro.